Por: Edwin Martínez, Actualizado 27 Oct 2022
Justo cuando crecen las voces en Nueva York para que pronto se cierre la cárcel de Rikers Island, donde 17 presos, entre ellos varios latinos, han muerto bajo custodia de las autoridades penitenciarias, legisladoras de la Gran Manzana están impulsando un proyecto de ley que busca reducir la población carcelaria de manera segura.
Así lo reveló la concejal Carlina Rivera, presidenta del Comité de Justicia Penal del Concejo Municipal, tras presentar la pieza legislativa, que requeriría que la Oficina de Justicia Criminal del Alcalde (MOCJ) establezca equipos de revisión de la población reclusa en los penales, a fin de identificar aquellos casos que podrían resolverse o que pudieran ser liberados en la comunidad de manera segura.
La líder política manifestó que los equipos de revisión de población carcelaria son “una estrategia innovadora ya implementada” en varias ciudades del país para agilizar el procesamiento de casos y reducir el tiempo innecesario de internos sin condenar que hay en las cárceles, muchos de los cuales padecen enfermedades mentales.
“Deberíamos estar trabajando activamente para reducir de manera segura la población carcelaria de nuestra ciudad, no solo porque Nueva York debe cerrar Rikers para el 2027, o porque cuesta más de $10,000 mantener a una persona en Rikers esperando su día en la corte, sino porque hay personas en nuestras cárceles que no merecen estar ahí y representan poco o ningún riesgo para nuestras comunidades”, aseguró la legisladora.
La líder política, de origen hispano, señaló además que urge revisar de cerca a la población en las cárceles, pues se sabe que las personas con enfermedades mentales graves representan de tres a cuatro veces la población carcelaria que la población general.
“Más del 80 por ciento de las mujeres y las personas de género expansivo en la cárcel reciben tratamiento por enfermedades mentales, y cuando hay prejuicios institucionales sobre la raza y minorías étnicas en la cárcel con más frecuencia y por más tiempo que el promedio, nuestra ciudad sufre”, agregó la concejal Rivera.
La política del Bajo Manhattan destacó que los equipos de revisión de la población carcelaria que propone su ley, estudiarían, revisarían y harían recomendaciones informadas sobre quién puede ser liberado de los penales de manera segura.
“El procesamiento de casos simplificado es solo una forma en que podemos reducir el tiempo en prisión innecesario e incluso perjudicial impuesto a los neoyorquinos”, concluyó la presidenta del Comité de Justicia Penal del Concejo Municipal.
La meta de la pieza de ley también busca contar con personal suficiente para implementar el plan, y crear esfuerzos para involucrar a los tribunales y fiscales de distrito.
Asimismo, se busca que los equipos que se constituyan, estén compuestos por representantes del Departamento de Correccionales, la Oficina de Justicia Criminal del Alcalde (MOCJ), los Servicios de Salud Correccionales, el Departamento de Libertad Condicional y abogados.